Una vez más el ciudadano se encuentra secuestrado por un conflicto de terceros. Desde hace semanas, miles de pasajeros se han visto perjudicados por actuaciones en los servicios del control y supervisión de acceso a las zonas de embarque del aeropuerto del Prat-Barcelona, con la consiguiente pérdida de vuelos y el retraso o anulación de pasajes previamente adquiridos, entre otras circunstancias.